Llego hasta aquí



 Comandos
 Ayudas
    Afición (64)
    Ambientación (201)
    Reglas (112)
    Equipo (211)
    Sucesos (174)
    Aventuras (147)
    Preg./Resp.
 Por autor
 Productos
 Enlaces
 





Licencia Creative Commons para el texto de la web (quedan excluidas de la licencia CC las ilustraciones)


jueves, 28 de marzo de 2024


 

La Armada Italiana (2ª parte)

Acorazados

Comentábamos en el primer artículo de esta serie (Ver) que la armada italiana había llegado al inicio de la Segunda Guerra Mundial con una flota poderosa en números, pero débil en la práctica, con buques veloces, pero pobremente armados (en el sentido naval) y mal dirigidos. También decíamos, que a partir del auge del nazismo, Italia se empeñó en superar en tonelaje a Francia a la que consideraba su enemigo natural en el Mediterráneo. En este artículo hablaremos de los buques de mayor tonelaje de la armada italiana.

Supervivientes de la Primera Guerra Mundial

La mayor parte de los navíos de gran tonelaje de la Primera Guerra Mundial fueron desmantelados antes del inicio de la siguiente guerra, pero una serie de ellos se quedaron en servicio. En general eran lentos, con poca maniobrabilidad y estaban obsoletos, lo que obligó a reformarlos en profundidad en los años previos a la guerra.

Clase Cavour

Conte di Cavour en unas pruebas de velocidad

La clase Cavour desplazaba unas 29.000 toneladas y tenía una eslora de 187 metros, una manga de 33 metros y un calado de 9.3 metros. Su tripulación era de 1260 personas, alcanzaban los 27 nudos y tenían una autonomía de 6400 millas náuticas a 13 nudos. Llevaba dos torretas triples y dos gemelas de 320 mm, 6 gemelas de 120 milímetros y 6 torretas gemelas de 100 mm en función antiaérea. El blindaje del casco variaba entre los 135 y los 165 mm y entre los 130 y 280 en la cubierta, las torretas y los puestos de mando.

Dos buques de esta clase sobrevivieron al periodo de entreguerras ambos botados en 1911:

El Conte de Cavour superó la Primera Guerra Mundial sin participar en una misión de combate y tras varios usos propagandísticos y su participación en la invasión de Corfú, fue atracado en 1928 y desmanteladas sus armas. En 1933 fue enviado a Trieste para su reconstrucción. Volvió al servicio en 1937, pero los cambios habían sido muy grandes, modificaciones de la estructura para alojar nuevos cañones y sus sistemas de munición y cambio de los motores (que le permitieron alcanzar los 28 nudos). Participó en la batalla de Calabria y resultó alcanzado por el ataque británico a Tarento. El buque se hundió en aguas poco profundas y fue reflotado y enviado a Trieste de nuevo para ser mejorado con armamento antiaéreo. Sin embargo, nunca llegó a salir de los astilleros y en 1943, cuando Italia se rindió, quedó en manos alemanas que lo abandonarían en 1945 en el bombardeo Aliado del 15 de febrero. Dos años después lo desmantelarían.

La historia del Giulio Cesare es similar en sus inicios a la del Cavour. Botado en 1911, no participó en ninguna misión de combate durante la Primera Guerra Mundial, formó parte de la flota que invadió Corfú en 1926. A diferencia de su gemelo, El Cesare fue utilizado como buque de entrenamiento de artillería, pero en 1933 volvió a los astilleros de Tarento para ser modernizado. Participó en la batalla de Punta Stilo donde resultó dañado; ostentando el triste record de ser el buque de superficie alcanzado desde más lejos por la artillería naval en toda la historia (a 24 kilómetros de distancia). Se salva de los bombardeos Aliados sobre Messina y participa en la batalla del Cabo Teulada. Se traslada a Nápoles tras la batalla donde los bombardeos Aliados le dañan ligeramente y hacen que sea trasladado a Génova. En febrero de 1941 se salva del ataque de la flota británica contra la ciudad y, a partir de entonces, debido a sus deficiencias por su antigüedad, es transferido a la escolta de convoyes, misión en la que participará hasta enero de 1942 en el que se decide dejarle en puerto al estar obsoleto. Tras el armisticio de 1943, el buque pasaría a manos de los Aliados y sería internado en Malta y, más tarde, en Tarento. En 1949 fue entregado a la Unión Soviética como parte de los pagos de compensación de la guerra. Los soviéticos lo llamaron Novorossiysk y se hundió a causa de una explosión misteriosa en octubre de 1955 en la bahía de Sebastopol. Murieron 608 marineros y fue el mayor accidente naval soviético. Respecto a las causas, hay quién asegura que el buque explotó al toparse con una mina magnética alemana de la Segunda Guerra Mundial, otros creen que submarinistas MAS italianos lo hundieron en venganza por haberlo entregado a los rusos y una tercera teoría apunta a que el barco explotó antes de tiempo y que era una estratagema soviética para acusar a los turcos y justificar su intervención en los Dardanelos.

Clase Doria

El Andrea Doria y el Caio Duilio

El Andrea Doria y el Caio Duilio son dos dreadnought (una denominación que se utilizaba inicialmente para los acorazados) construidos entre 1912 y 1916 como una clase sucesora o mejorada de la Cavour. Llevaban cañones de 305 milímetros. A semejanza de los anteriores, no entraron en combate durante la Primera Guerra Mundial. Participaron en la invasión de Corfú, pasaron a la reserva y luego fueron modificados a finales de los años 30. Las modificaciones también fueron importantes, el cambio de los cañones a 320 milímetros, el cambio de los motores y modificaciones en la estructura. Ambos sufrieron el ataque de Tarento de 1940, el Doria escapó sin daño, pero el Duilio tuvo que embarrancar para evitar hundirse (las reparaciones acabarían en mayo de 1941). Fueron utilizados en misiones de escolta de convoyes en 1941, pero su escasa autonomía (por falta de depósitos de combustible mayores) hizo que los retiraran del servicio en 1942. Ambos cayeron en manos Aliadas tras la rendición de Italia y tras la guerra continuaron en servicio en la armada italiana hasta 1961 y 1957 respectivamente.

La clase Andrea Doria desplazaba unas 29.000 toneladas y tenía una eslora de 187 metros, una manga de 28 metros y un calado de 10.3 metros. Su tripulación era de 1520 personas, alcanzaban los 26 nudos y tenían una autonomía de 4000 millas náuticas. Llevaba dos torretas triples y dos gemelas de 320 mm, 4 triples de 135 milímetros y 10 cañones adicionales de 90 mm en función antiaérea. Además, llevaba 6 montajes gemelos y 3 triples de 37 mm, también antiaéreos y 8 cañones gemelos de 20 mm AA. El blindaje alcanzaba los 280 mm en las torretas y puestos de mando, entre 100 y 250 en el casco y unos 130 mm en el resto de la cubierta.

Del período de entreguerras

Clase Littorio

La fabricación de esta clase comenzó en 1930 y fueron los primeros acorazados modernos fabricados por Italia tras la Primera Guerra Mundial. Cuatro buques de esta clase se fabricaron, pero sólo tres entraron en servicio en el 40 (el Vittorio Veneto y el Littorio) y en el 42 (el Roma). En 1939 fue botado (sacado de los astilleros) el Impero, pero nunca llegó a terminarse y lo desmantelaron entre 1948 y 1950.

La clase Littorio desplazaba casi 41.000 toneladas, medía 238 metros de eslora, 37 de manga y 11 metros de calado. Su tripulación era de 1820 personas, alcanzaban los 20 nudos y tenían una autonomía de 4580 millas náuticas a velocidad de crucero, 16 nudos. Tenía 9 cañones de 381 mm L/50, 12 cañones de 152 mm L/55, 12 cañones de 90mm AA, 20 cañones de 37/65 mm, 4 cañones navales de tiro rápido de 120mm y varios cañones lanzabengalas. El blindaje del casco era de 280 mm, unos 150 mm en la cubierta y 350 mm en las torretas. Llevaba una catapulta para el lanzamiento de aviones y podían transportar hasta tres de ellos.

El Vittorio Veneto en la batalla del Cabo de Matapán

El Vittorio Veneto participó de forma decisiva en varias batallas durante 1941 (Cabo Teulada) o 1942 (Cabo Matapán, donde recibió el impacto de un torpedo que le obligó a volver a su base en Tarento), pero gran parte de sus misiones fueron de escolta de convoyes o de intento de intercepción de los convoyes británicos. Su presencia, junto al Littorio, fue clave para desmantelar la Operación Vigorous (suministro británico desde Alejandría). Tras el armisticio, el buque quedó en manos Aliadas que lo mandaron a Egipto con la idea de utilizarlo en el sur de Francia o en el Pacífico (según las necesidades). No se usó en esos frentes y al final de la guerra, los británicos, que teóricamente deberían quedarse con él en compensación por las pérdidas sufridas durante la guerra, renunciaron a él. Los italianos quisieron mantenerlo en servicio, pero los gobiernos Aliados no estaban de acuerdo y tras una serie de disputas diplomáticas, los italianos se vieron obligados a desmantelarlo en 1948.

El acorazado Littorio

El Littorio participó en varias operaciones hasta que en 1940 también fue sorprendido en Tarento por el ataque Aliado a la base. Resultó dañado y hundido en aguas poco profundas, lo que permitió que lo reflotaran varios meses después. Entre septiembre de 1941 y 1942, el buque participó en varias misiones de escolta de convoyes al norte de África y en las dos Batallas de Sirte. Fue en la segunda donde recibió el impacto de un torpedo, pero consiguió llegar a puerto y ser reparado. En Julio de 1943 le cambiaron el nombre por Italia y tras las rendición italiana de septiembre se dirigió a Malta cumpliendo el armisticio. Fue alcanzado durante el viaje por una bomba alemana teleguiada Fx 1400, pero consiguió llegar a su destino. Debía ser entregado a los estadounidenses tras la guerra como pago de compensación, pero estos renunciaron al barco y tras una batalla diplomática perdida, se vieron obligados a desmantelarlo entre 1948 y 1955.

El acorazado Roma

El Roma fue terminado a mediados de 1942, cuando la guerra en el Mediterráneo casi había concluido y su participación en las operaciones navales fue menor. De forma similar a sus gemelos, el buque fue utilizado en los últimos meses de la participación italiana en la guerra como defensa antiaérea en algunas ciudades. Fue dañado varias veces por los bombarderos, pero reparado para continuar con su labor defensiva. Durante el armisticio formó parte de la flotilla italiana que se dirigía a Malta para rendirse, pero no consiguió llegar a su destino porque fue hundido por una bomba alemana teleguiada Fx 1400. Tiene el triste honor de ser el primer buque de guerra hundido por un arma de este tipo.

 

 

Diario Sombra:

Subscríbete en Feedly

Redes Sociales:



Grupos de jugadores:




Cita

«Creo que fue la vanidad de Goering la causa de la fatal decisión de Hitler.»

Coronel Guderian