ANIMALES:

Armas de combate

Aprovechamos este número de la revista para introducir un tema que no aparece en el libro de Comandos. Nos referimos a los animales que de alguna forma acompañaban a los ejércitos.

La oficina de inteligencia militar estadounidense estuvo haciendo experimentos con murciélagos para ver si podían enseñarles a transportar bombas incendiarias hasta objetivos militares. El experimento, que sepamos, fue un rotundo fracaso, pero es un buen ejemplo de las peregrinas ideas de la inteligencia militar respecto a los animales.

No vamos a hacer un estudio intenso de los animales para Comandos de Guerra, pero, tras la petición de un lector, incluimos algunas estadísticas para que los animales puedan aparecer en las partidas. Considéralos simples ejemplos y varía los datos como creas más oportuno:

PERRO

Los perros son los animales más comunes. Fueron utilizados en la mayoría de los ejércitos en tareas de vigilancia (campos de prisioneros), exploración y búsqueda (concretamente búsqueda de cadáveres).

Nota: en algunos países del sudeste asiático, los perros son parte de la dieta habitual.

CABALLO

Si los jinetes hubieran podido cambiar sus monturas por tanques y los carreteros por tractores de artillería, ninguno de estos animales habría participado en el conflicto. Desgraciadamente para ellos, tanto los tanques como los tractores de artillería estaban caros y eran escasos, por eso el caballo se convirtió en una maquinaria de guerra más (la caballería) y en un instrumento de tiro (para remolcar las piezas de artillería.

Distinguiremos el caballo de montar

del caballo de tiro.

PALOMAS MENSAJERAS

A pesar de los grandes avances tecnológicos del siglo XX previos a la Segunda Guerra Mundial, las palomas mensajeras se siguieron utilizando como un medio para corroborar los mensajes de radio y, en algunos casos, como el único medio para mandar mensajes.