Número: 223.     4ª época.     Año XXI     ISSN: 1989-6289

223 > Redacción > Editorial > Editorial. Por: Juan Carlos Herreros Lucas

 

Editorial

Estas últimas semanas han sido, como sabréis, las Ludo Ergo Sum y, como también os habréis enterado, han vuelto a tener problemas con los responsables de la administración. Yo creo que los camisetas naranjas (así viste la organización durante el evento) son una especie difícil de encontrar porque año tras año les ponen zancadillas y vuelven. Y como decimos en mi casa: «no está paga'o». A mí me sorprende que sigan teniendo ganas con la cantidad de veces que les han hecho cambios de última hora que han mandado al guano toda la planificación de un año. Lo de este año ha sido especialmente gravoso y siento que solo con un «gracias» no es suficiente este año.

Las jornadas Ludo Ergo Sum antes de la apertura de puertas el sábado.

Es cierto que la administración es bastante generosa y cede diversos recursos para que las Ludo Ergo Sum puedan celebrarse: local, personal, material, etc., pero eso no puede significar nunca que les debamos pleitesía y que tengamos que aceptar de buen grado sus cambios de opinión. Ellos llevan en esa responsabilidad municipal, autonómica o estatal unos años, las LES llevan muchos más, muchísimos más y mueven a mucha gente, a mucha más gente de los que ellos serían capaces de mover para una actividad cultural con el mismo mísero presupuesto.

Una de las grandes dificultades de organizar unas jornadas de rol es la administración con la que tienes que lidiar casi de cero todos los años. Veo (y asisto) a eventos de otras aficiones (juegos de mesa, miniaturas, wargames, modelismo) y parece como si hubieran huido de esa dependencia de la administración; aunque es cierto que eso ha hecho que los asistentes también cambien las expectativas. Estoy convencido que hay que cambiar el modelo de jornadas de rol y dejar de depender de esta gente que, como mucho, solo mira a un año vista.

Ojalá supiera la solución, pero, cuando menos, habría que abrir el debate. Si dejamos que la gente que tiene ganas de organizar cosas se siga dando golpes contra la misma pared, pronto tendremos mucha gente con chichones y pocos voluntarios.

#yojuegoarol